jueves, 14 de abril de 2016

Obesidad mental


La obesidad mental bloquea cualquier aliento de movimiento, de acción. Anula los sentidos y la capacidad sensorial de estos en pro del principio del miedo por el que están atrapados y escondidos tras el personaje alimentario en el que te ha convertido. Consumidor de las entrañas contra las que te eriges y con las que sacias tus complejos y tu ansia bajo tu tejido mental y carnal. Ensanchando tu miedo y el polvo pegajoso que recorre tu cuerpo y todo lo que tocas. Ese polvo grasiento de injurias y escarnios, representación de tu apetito voraz por ser, de tu apetito insaciable de, de la representación de una disonancia mórbida y voraz que recrea una y otra vez su propio menú, cambiando de comensales según tu rancio mecanismo mental acepta o rechaza las reservas de los individuos conscientes del cólico profundo en el que te ha sumido tu obesidad mental.



Ilustración Steve Cutts. 

lunes, 4 de abril de 2016

El púlpito


 ...Aquellos que aspiran con ansias al púlpito con la idealización de su ideologización de la expresión de su enferma conciencia a través de sus extremidades desfiguradas por la palabra y la elevación de la objetividad de su lenguaje y perturbado intelecto, temerosos frente a la pureza de la tierra y abocados a la verdadera raíz de su herencia privilegiada y acomplejada frente a la violencia salvaje natural del hombre que rechaza los púlpitos y los axiomas de la intelectualidad cobarde y autoritaria que intenta dominar la vida y el talento despreocupado del animal y el universo que habita en, con su eterno y múltiple soliloquio disfrazado de, con el único propósito de la ascensión de su cuantiosa prepotencia temerosa de la libertad y la muerte...