lunes, 21 de julio de 2014

Una no tan extraña afiliación


trabajé en un bodrio de película y no me han
pagado nada.¡viva el cine español!
he ido a la CNT para saber qué puedo hacer al respecto.
allí un tipo medio ido me ha dicho que para hablar con un abogado
tengo que ser miembro del sindicato. la cuota son 12€ al mes;
pero se me permite pagar las cuotas según pueda, si estoy en paro.
al cabo del rato ya soy nuevo miembro. un cenetista más.
de alguna forma soy anarquista oficialmente y eso no me gusta nada.
ahora estoy señalado. ahora tengo que tener cierta moral. porque
la anarquía es muy dura amigos. no se crean ustedes que puedo ir
por ahí fijándome en quién me mira raro y golpearlo si me place.
aunque su actitud me esté molestando hasta el punto de provocarme
la urticaria nerviosa que me aprisiona todo el cuerpo en ciertas ocasiones.
esto no es ser un buen anarquista amigos. un buen anarquista trabaja duro;
tiene compañeros, se educa y aprende con los demás…y toda una
serie de cosas que tienen que ver con la colectividad. por favor,
cómo odio este tipo de cosas. soy un jodido individuo egoísta. odio la anarquía; pero odio con más fuerza la democracia. yo sólo quiero que me paguen
mi puto trabajo y me dejen tranquilo. no necesito mucho; en eso estamos de acuerdo. la anarquía es para los fuertes. y esos ya han muerto.
me los llevé a la tumba a todos. ahora no queda nada. sólo queda
la asesina que nos aprieta más y más y nos corta el cuello con
hojas afiladas, impolutas superficialmente, manchadas.
el abogado no ve nada claro el caso. para esto no me he afiliado;
me digo tirado en un bar en el que un viejo llamado Joaquín
me interroga y me predice ciertas cosas. el mundo se acabará en 2013
y le doy mucha pena porque soy inteligente y no me doy cuenta
que vivo rodeado de una sarta de mentiras. eso pienso yo; sólo espero
que me paguen antes de ello y sobrevivir hasta entonces. y quizás
pague las cuotas del sindicato.









No hay comentarios:

Publicar un comentario